Eneagrama y las Pasiones de tu EGO al descubierto
Qué es el Eneagrama
El Eneagrama es una guía de la conducta humana que perfila nueve tipos diferentes de estilos de personalidad o patrones de conducta. Ofrece una hoja de ruta para que cada persona pueda mejorar, crecer y desarrollarse, consiguiendo la satisfacción que produce superar las limitaciones del caracter .
El propósito principal del Eneagrama es revelar el tipo al que pertenecemos cada uno, descubriendo así nuestro mandato interno y entender la motivación de muchas de nuestras actitudes y las de quienes nos rodean. El Eneagrama es una herramienta de mayor autoconocimiento de muchas de nuestras reacciones inconscientes.
El camino del Eneagrama debe ser recorrido personalmente: podemos recibir sugerencias y escuchar a los demás, pero sólo el estudio de las características de cada eneatipo en nuestra personalidad, nos ayudará a reconocer que número somos.
El Eneagrama no pretender ser una jaula que aprisiona encasillándonos en un número, debemos contemplarlo como una oportunidad de conocernos que nos lleve de la inconsciencia a la consciencia y que permita liberarnos de ciertas ataduras.
En que te ayuda el Eneagrama
El propósito es conocerse a sí mismo, y el método de auto-observación, es el mejor camino ara ello. El Eneagrama permite observar el interior de uno, siendo un mapa extraordinariamente bueno para ello, aunque no puede reemplazar el paisaje de lo que es real.
Podemos acercarnos al Eneagrama cuando queramos responder a la pregunta esencial de quiénes somos en realidad, más allá de la genética que heredamos, del nombre que nos pusieron, de las sucesivas identificaciones que vamos adquiriendo a lo largo de los años y de la “máscara” o “persona” en que nos hemos ido convirtiendo.
La psicología de los Eneatipos ayuda a mirarnos hacia dentro para conocer nuestros aspectos más limitadores, nuestros puntos ciegos, nuestras reacciones inconscientes, fijadas en nuestra personalidad sin que nos demos cuenta entorpeciendo el desarrollo de una vida actual plena y armoniosa.
“Cada persona desarrolla un estilo de personalidad para compensar la falta, el vacío ontológico que se sitúa en el corazón del ego.” Oscar Ichazo
Como se interpreta el Eneagrama
Según el área del cerebro que utilicemos como timón de nuestra personalidad, podemos distinguir tres personalidades básicas simbolizadas en los vértices del triángulo central del Eneagrama que contiene los Eneatipos 3, 9 y 6, estas personalidades primarias o básicas crean por combinación con los otros vértices del triángulo el resto de las personalidades del Eneagrama y representan los tres centros de las tres Tríadas.
Tríada del Instinto
Corresponde a personas de carácter visceral, que reaccionan instintivamente desde su cerebro reptiliano. La pasión o impulso básico de reacción de estas personas es la Ira. En el centro de esta Tríada tenemos al Eneatipo 9 y a sus costados los Eneatipos 8 y 1.
Los instintos más básicos de supervivencia se relacionan con el hacer. Estos temperamentos suelen estar focalizadas en el presente, que es donde los instintos nos dicen qué hacer para conseguir la supervivencia.
Las personas que reaccionan fundamentalmente desde su cerebro reptiliano, lo hacen impulsadas por la Ira, entendida como la respuesta visceral natural ante la amenaza que afecta la supervivencia, la defensa territorial o de grupo.
Las nueve pasiones, basadas en otras tantas distorsiones cognitivas, generan nueve tipos de carácter y en el Eneagrama se convierten en nueve formas personales de buscar el núcleo del verdadero Yo y observarlo.
La Tríada del instinto está formada por los tipos ocho, nueve y uno. La pasión básica es la IRA. Intentan usar su voluntad para influir en el mundo. Temen ser dominados o explotados. Se vuelcan a la gestión y se orientan al presente.
La Tríada del sentimiento
Corresponde a personas de carácter emocional que reaccionan desde el sentimiento, que corresponde al cerebro límbico y cuya pasión o impulso básico es la imagen propia, entendiendo por imagen la construcción emocional que hacemos de nuestra personalidad, con el fin de sentirnos dignos de ser amados. En el centro de esta Tríada tenemos al Eneatipo 3 y a sus costados los Eneatipos 2 y 4. Estas personalidades están impulsadas por el sentir emotivo, y suelen vivir más en el pasado que en el ahora, que es donde evalúan el resultado de sus esfuerzos por ser amados.
Los Eneatipos que pertenecen a la Tríada de las emociones basan sus acciones y ideologías en sus sentimientos, dando mucha importancia a las relaciones y buscan sentirse amados.
La Tríada del sentimiento está formada por los tipos dos, tres y cuatro. Su pasión básica es la VERGÜENZA, como sentimiento de falta de valía y autoestima.
Tríada del Pensamiento
Corresponde a personas de carácter intelectual que reaccionan desde el pensamiento, que corresponde al cerebro neocórtex y cuya pasión o impulso básico es el miedo, entendido por miedo como el temor a no contar con los recursos necesarios para enfrentar la existencia. En el centro de esta Tríada tenemos al Eneatipo 6 y a sus costados los Eneatipos 5 y 7.
Estas personalidades están impulsadas por el pensar y suelen estar más en el futuro que en el presente, anticipando nuevos y posibles escenarios.
La Tríada del pensamiento está formada por los tipos cinco, seis y siete. Su pasión básica es el MIEDO, como sentimiento de falta de valía.
Eneatipos de personalidad
- El iracundo, que algunos autores prefieren llamar “perfeccionista”, “reformador”, o “emprendedor“, según el énfasis puesto en uno u otro aspecto de la personalidad, mientras que otros se limitan a llamarle “patrón uno” de comportamiento, parte de un cierto nivel de resentimiento, pero no acostumbra a ser una persona violenta, aunque perfeccionista y obsesiva, apegada a las reglas y a cómo debería ser el mundo. La inflexibilidad es uno de sus rasgos. Su ira contenida hace que, paradójicamente, suela mostrarse como persona educada y, a veces, flemática.
- El orgulloso, “ayudador”, “altruista”, “colaborador”, “auxiliador”, o “patrón dos”, no es el tipo de personas que conocemos como orgullosas, sino altamente emocional, seductor e inmerso en un mundo de falsa abundancia que se manifiesta en un exceso de dadivosidad y adulación, tal vez de excesivo amor superficial, a la espera de reciprocidad, casi nunca pedida. Suele querer ser centro de atención, por lo que, a veces, resulta algo histriónico.
- El vanidoso, “motivador”, “ejecutor”, “luchador”, “triunfador”, “mantenedor del status”, “productor”, “ejecutante” o “patrón tres”, no tiene por qué ser una persona atildada, sino fundamentalmente pendiente de la mirada ajena para recibir aprobación y conformar de este modo una identidad. Suele adaptarse como el camaleón, siempre sensible al cambio del viento y a los colores del entorno. Su meta podría ser estar de moda o triunfar en cualquier medio social.
- El envidioso, “artista”, “romántico”, “individualista”, o “patrón cuatro”, basado en la melancolía y en la insatisfacción permanente, sufre para evitar la recriminación, la competencia y la responsabilidad. Suele encontrarse a gusto en el papel de víctima. Por su extremada sensibilidad es capaz de captar el sufrimiento ajeno, solidarizarse incluso con él y, por ello considerarse a veces superior en su fuero interno, pues sabe que los demás no pueden alcanzar tan fácilmente su profundidad de sentimientos.
- El avaro, “pensador”, “observador”, “investigador” o “patrón cinco”, parte de un falso desapego, que limita la expresión de sus emociones al mínimo, así como sus relaciones sociales. Suele ser indiferente a la crítica y a las alabanzas ajenas, ya que le cuesta tanto dar como recibir. Su aspecto exterior es distante y frío. En el fondo busca el conocimiento a través de la observación y el análisis, pues se encuentra más a gusto en el mundo mental que en el universo de los sentimientos o en el plano de la acción.
- El miedoso, “leal”, “abogado del diablo”, “soldado”, “héroe”, “escéptico”, “solucionador” o “patrón seis”, le gusta controlar su entorno, anticipar todos los problemas, tener las soluciones de antemano, para no verse sorprendido. Basado en una cierta cobardía y desconfianza ante el mundo, algunas veces se convierte en un “valiente compulsivo” que huye hacia delante como actitud contra fóbica frente a lo que teme. Inseguro y desconfiado puede convertirse en un racionalista que duda de su propia duda. Suele poseer un fino olfato para detectar la falsedad, el engaño y la mentira.
- El goloso, “generalista”, “epicúreo”, “optimista”, “visionario”, “aventurero” o “patrón siete”, que tiene como base la planificación y la auto indulgencia, no lo es principalmente de comida, sino de experiencias, de amistades y de conocimientos. Huye fundamentalmente del dolor, por lo que suele intentar ser positivo y tener solución para todo. Optimista por naturaleza suele encontrar el lado ventajoso de cualquier situación, perdiéndose así la riqueza del lado oscuro de la luna.
- El lujurioso, “jefe”, “desafiador”, “protector”, “cabecilla”, “asertivo” o “patrón ocho”, basado en la venganza y el castigo, parece el más antisocial de todos los caracteres; suele definirse por su impetuosidad arrogante y su ausencia aparente de sentimiento de culpa. Para él, la vida no tiene sentido sin intensidad. Se encuentra mejor en la acción que en la reflexión y puede llegar a ser un excelente líder al que los que le rodean seguirán por su arrojo.
- El indolente o perezoso, “pacificador”, “mediador”, “amante” o “patrón nueve”, no es forzosamente una persona inactiva, sino que antepone las necesidades de los demás a las propias, ya que se ha acostumbrado a “olvidarse de sí” en una especie de insensibilización a su propio dolor. Sobre adaptado y complaciente, se le reconoce por su servicialidad compulsiva. Son excelente mediadores, pues soportan con dificultad el conflicto y la confrontación.
Que Eneatipo soy
No existe un Eneatipo mejor que otro, todos tienen bonitas cualidades que contribuyen a la sociedad, es por eso, que el crecer como personas no nos aleja de nuestro Eneatipo, sino que nos lleva a vivirlo en armonía y plenitud en su variante sana, disfrutando plenamente nuestra personalidad.
Reconocernos en un número no debe ser en caso alguno la meta de este viaje a nuestro interior. Todos los números habitan dentro de nosotros esperando que se den las condiciones propicias para manifestarse. Podemos entender el Eneagrama como un trayecto, en la cual vamos creciendo como personas al incorporar a nuestra personalidad aspectos que solemos negar y rechazar, cuando insistimos en definirnos como seres estáticos.
Cada eneatipo nos aporta algo y cada uno tiene una enseñanza para regalarnos, privarnos de una de ellas, negándola o enjuiciando, sólo nos privará de engrandecer nuestra personalidad.
En el camino de reconocernos es interesante ir integrando aquellos rasgos que hemos estado negando por mucho tiempo.
Al preguntarte, que numero soy en el Eneagrama, a menudo se nos suele armar una tremenda confusión al escoger entre las descripciones y hacer los test.
Al contestar los cuestionarios solemos responder según la imagen idealizada que tenemos sobre cómo deberíamos ser, por eso, que más que compartir y ver cómo actúa un determinado número, es recomendable observar cuáles son las motivaciones que lo llevan a actuar de tal o cual manera. Obsérvate durante un tiempo y abre los cinco sentidos para percibir como actúas en las situaciones de estrés.
Consejos útiles a la hora de intentar identificar tu Eneatipo
Para identificarnos con un Eneatipo se recomienda, primeramente, el consejo de alguien experimentado es esta herramienta ya que cada uno de nosotros puede sentirse representado con muchos aspectos de todos los Eneatipos y que esas facetas pueden manifestarse en distintas etapas y circunstancias de la vida.
Frases para cada Eneatipo
El Uno: debo hacer lo correcto
El Dos: debo ayudar al prójimo
El Tres: debo tener éxito
El Cuatro: debo ser especial.
El Cinco: debo aprender mucho.
El Seis: debo cumplir con mi deber
El Siete: debo ser feliz
El Ocho: debo ser fuerte
El Nueve: debo vivir en armonía
Que significan las flechas del Eneagrama
Si echamos un vistazo la figura del Eneagrama podemos ver que cada número está conectado a otros dos mediante un par de líneas que cruzan el círculo, estas son las líneas llamadas de integración y desintegración.
El número 1 se integra al 7 y se desintegra al 4.
El número 2 se integra al 4 y se desintegra al 8.
El número 3 se integra al 6 y se desintegra al 9.
El número 4 se integra al 1 y se desintegra al 2.
El número 5 se integra al 8 y se desintegra al 7.
El número 6 se integra al 9 y se desintegra al 3.
El número 7 se integra al 5 y se desintegra al 1.
El número 8 se integra al 2 y se desintegra al 5.
El número 9 se integra al 3 y se desintegra al 6.
Eneatipos y subtipos
Un subtipo podría traducirse como
“Aquello que es lo más importante para mí en la vida”
Dentro del centro instintivo, el Eneagrama distingue tres instintos o impulsos primarios: el Sexual, el Social y el instinto de Auto-conservación
El subtipo implica sobre-desarrollar un área de la vida, mientras que, al mismo tiempo, existe otra área eclipsada y subdesarrollada. Constantemente nuestra atención y energía se enfoca de manera inconsciente hacia el “área problema”, es decir hacia el subtipo dominante.
Subtipo de Auto-conservación: “Yo”
Deseo de sentirse seguro. Se refiere a cómo cuidamos de nosotros mismos. Personas continuamente preocupadas, así sea de forma sutil, con lo esencial para vivir: Alimento, salud, refugio, seguridad y comodidad física, hogar, dinero y estabilidad. Ponen la atención en buscar las condiciones óptimas para sentirse bien, se preocupan por su propio bienestar.
Subtipo Sexual o Intimo: “Tú y Yo”
Deseo de intimidad o de sexualidad. Relaciones estrechas uno-a-uno. Enfocados en si son deseables y atractivos para los demás. Coexiste una búsqueda personal de situaciones emocionalmente intensas. Les atrae el contacto íntimo, tanto una conversación profunda con una persona fascinante como en una relación sexual. Buscan constantemente una pareja -su media naranja- y si la tienen desean estar con ella. Buscan la solución a sus problemas en “algo” externo que los complete y llene. Pueden llegar a obsesionarse con ese “algo” y descuidar otras necesidades
Subtipo Social: “Todos Nosotros”
Deseo de interactuar con otros. Actividad Comunitaria. Existe un gran interés por caer bien a los demás y por pertenecer a un grupo de referencia o apoyo. Les preocupa ser aceptados y obtener una posición de privilegio o de reconocimiento dentro de su grupo, familia o trabajo. Les gusta la diversión general.
Eneatipos Famosos (películas)
Otra forma de conocer la psicología de los Eneatipos
Eneatipo 1: “Los Miserables”, el inspector
Eneatipo 2: “Mujeres desesperadas”, varias de las protagonistas
Eneatipo 3: “Zoolander”, Derek
Eneatipo 4: “Entre Tinieblas”, Yolanda, la protagonista
Eneatipo 5: “El perfume”, Jean-Baptiste Grenouille
Eneatipo 6: “Rambo”, Silvester Stallone
Eneatipo 7: “La vida es bella”, Roberto Benigni
Eneatipo 8: “Beethoven” Charles Grodin
Eneatipo 9: “El diario de Bridget Jones” Renée Zellweger
Quien inventó el Eneagrama
Lo que conocemos del Eneagrama actualmente tuvo su inicio con George Gurdjieff, Rusia 1877. El Cuarto Camino. Conocimiento del maestro subsistido hasta nuestros días. El Eneagrama ingresó en la cultura occidental a través de las Escuelas de Gurdjieff, quien trabajó con sufíes y otros seminarios tradicionales de conocimiento esotérico en oriente.
Se atribuye el conocimiento del Eneagrama sufí en círculos académicos, a Oscar Ichazo primero en Chile, de donde es originario y luego en EEUU. Ichazo se educó en Bolivia y Perú y fue introducido en la tradición sufí del Eneagrama por un hombre cuyo nombre él prefirió no revelar. Algunos años después Ichazo cautivó la atención de algunos miembros de Esalen (California), entre los que se encontraban Claudio Naranjo, psiquiatra chileno y creador del Instituto SAT (Seekers After Truth – Buscadores de la Verdad-), O`Leary, Helen Palmer y otros prestigiosos especialistas que actualmente enseñan este conocimiento.
Se trata de un diagrama, de una estrella de nueve puntas (Eneas = Nueve) que puede ser utilizado para trazar el proceso de cualquier acontecimiento, desde su principio y a través de todas las etapas de progreso de dicho evento en el mundo material, pero aquí nuestra orientación es psicológica y está aplicada al estudio del carácter humano.
Que es un Eneagrama y para que sirve
El trabajo con el Eneagrama se inicia con la visión del ser humano comprendido como una unidad esencial, esta unidad es representada por el círculo exterior que envuelve la estrella. Esta totalidad se muestra a través de tres aspectos que nos llegan por vía genética y se acaban de conformar con las relaciones familiares y socioculturales de los diversos ambientes en los que vivimos.
Estos centros, de los que parten todas nuestras vivencias son los llamados Instintivo, Emocional y Cognitivo.
Cada una de estas zonas, gobierna ciertas respuestas de nuestra personalidad que se pueden clasificar como reacciones “instintivas”, “emocionales” o “intelectuales. Cada uno de estos centros posibilita experiencias muy diferentes y a la vez complementarias.
Los seres humanos poseemos este cerebro trino y tenemos reacciones instintivas, emocionales e intelectuales, pero parece que, al configurar nuestra personalidad, hay una de sus partes que usamos preferentemente y esa sería la que rige nuestras reacciones más automáticas; obviamente funcionamos en base a las tres partes del cerebro, pero uno de estos comportamientos gobernaría o se adelantaría en reacción a los otros.
De esta forma, hay personas que reaccionan desde las vísceras, (reacciones instintivas); otras desde el corazón, (reacciones emocionales); y otras desde la cabeza, (reacciones intelectuales).
Centro Instintivo
Ubicado en la zona del bajo vientre, es la zona del instinto, de la supervivencia que hemos heredado de nuestros ancestros los reptiles. También tenemos una parte de nuestro cerebro, llamada justamente “cerebro reptiliano” que es la más primaria.
Aquí encontramos también los órganos sexuales para la reproducción y todo lo sensual y sexual se deriva de este centro, aquí las necesidades están orientadas a la vida y a la supervivencia de la especie.
En este cerebro se desarrolla el sentido de la delimitación territorial y la programación rutinaria básica de supervivencia, como son conseguir alimento y refugio.
Estas características suponen que es aquí donde se desarrolla el origen de los comportamientos obsesivos y rutinarios, el carácter conservador y poco afín a los cambios.
Centro Emocional
Las emociones son nuestro lenguaje relacional. Nuestro sistema límbico controla las respuestas emocionales asociadas a nuestro quehacer.
Con la aparición de los mamíferos sobre el planeta, hubo un crecimiento explosivo de algunas regiones del cerebro reptiliano que posibilitaron la formación del segundo cerebro, el límbico, y con él la posibilidad de sentir y expresar emociones.
Las emociones las solemos ubicar en la zona de nuestro corazón físico. Esta parte del cerebro modula funciones específicas, que le permiten al animal distinguir entre lo agradable y lo desagradable
Centro Cognitivo
En el neocórtex residen funciones más complejas, como el razonamiento lógico y la imaginación. El cerebro superior o racional corresponde al cerebro de los mamíferos superiores, incluyendo a los primates y a los humanos. Representa la tercera etapa evolutiva del cerebro. Su red de células neuronales, altamente compleja, es capaz de producir el lenguaje simbólico, la capacidad de investigar e inventar y el pensamiento abstracto.
El cerebro humano está constituido por los tres cerebros ya descritos, y nuestro quehacer y reaccionar está influenciado por todos ellos, pero pareciera que, para manifestarnos en nuestra experiencia de ser, nuestra psique escoge uno de ellos como impulsor de nuestra personalidad. Así, existen personas que funcionan motivadas por el cerebro reptiliano, es decir, desde su centro instintivo; otras por el cerebro límbico, es decir, desde su centro emocional, y un tercer grupo por el neocórtex cerebral, es decir, desde su centro intelectual.
Donde estudiar Eneagrama
Si te interesa estudiar Eneagrama, consulta la oferta de seminarios y apúntate a nuestros cursos.